Normalmente, las personas que amamos viajar con nuestra casa a cuestas, somos personas tranquilas, que amamos la naturaleza, la libertad de levantarnos en un punto cualquiera y que disfrutamos del camino. Pero nunca está demás recordar que existen límites de velocidad...
Sí, sabemos que conducir una autocaravana es sinónimo de viajar sin prisas, pero también que hay veces que los kilómetros hasta llegar a nuestro destino son cientos _o incluso miles_ y más nos vale apretar un poco el acelerador. Pero, ¿ cuál es la velocidad máxima...
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